En este mes de abril la Minurso, que es la misión de la ONU para la celebración del referéndum en el Sáhara Occidental, tiene que renovar su mandato para vigilar el cese el fuego pactado entre el Frente Polisario y Marruecos en el año 1991. En vísperas de la renovación de su mandato varias organizaciones no gubernamentales, junto con algunos Gobiernos han pedido que se incluya en el mandato de esta misión un mecanismo de vigilancia de los derechos humanos.
La novedad este año es la petición, del exenviado personal del secretario general de la ONU para el Sáhara Occidental Peter van Walsum, junto con Frank Ruddy, exvicepresidente de la Minurso, en la que solicitan al Gobierno francés que no ejerza el derecho al veto en la próxima reunión del Consejo de Seguridad sobre esta cuestión, para que se pueda acabar de una vez por todas con las violaciones de los derechos humanos y se encuentre una solución democrática, una vez que el pueblo saharaui logre expresarse con total libertad.
Ningún país que se considere democrático y defensor de la carta universal de los derechos humanos, debe impedir o hacer un uso político a favor de sus intereses, en relación al respeto a la manifestación pacífica y a las libertades básicas, tan necesarias para la dignidad de los seres humanos.
La próxima reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, es una oportunidad ideal para hacer de la misión de paz en el Sáhara Occidental una verdadera misión de defensa los derechos humanos.—Ali Salem Iselmu.
No hay comentarios:
Publicar un comentario