martes, 28 de octubre de 2008

ENTRE LA ESPERANZA Y LA VERGÜENZA


Más de veinticinco años lleva en pie el Muro de la Vergüenza, separando en dos mundos distintos un mismo territorio, ajeno para unos, añorado para otros. A un lado, la ocupación militar del Sahara Occidental por parte de Marruecos; al otro, los territorios saharauis liberados durante la guerra entre 1975 y 1991, tanto en uno como en otro familias destrozadas que añoran la parte que se encuentra al otro lado. El muro que comenzó a construirse en 1980 marca la compleja separación entre la esperanza y la vergüenza.
El Muro de la Vergüenza, como se le conoce internacionalmente, tiene una longitud de más de 2.720 kilómetros y fue construido para dividir el Sahara Occidental, separar a las familias de uno y otro lado y servir de defensa para el ejército marroquí ante los intentos del ejercito saharaui de recuperar sus territorios.Los datos asustan. Cada cuatro o cinco kilómetros Marruecos tiene desplegada una compañía militar. Cada 15 km hay un radar para informar a las baterías de artilleros, cerca de 200.000 soldados marroquíes le custodian, 250 baterías de artillería dispuestas para hacer fuego, 25.000 kilómetros de alambre de espinos, millones de euros en mantenimiento y miles de minas antipersonales. Hasta la fecha son cientos las víctimas que ha causado este muro. Cientos de civiles saharauis han perecido intentando atravesarlo.
Pero el muro llega mucho más allá, el muro se hace omnipresente en cada situación, en cada momento, en cada saharaui,en cada solidario.

“Dejé a mi niño con tres años. Ha ido creciendo en mi mente, solo Alá sabe si lo volveré a ver” . Fatma no renuncia a su pasado, no se resigna y maldice diariamente el muro que los tiene separados.

Una nueva manifestación. Una nueva columna. ¿Tendrá ésta más repercusión? ¿Acudirán las cadenas mas importantes de tv? ¿Encabezará Javier una enorme comitiva de gente mediática?..... o simplemente nos limitaremos a pasar unos días en los campamentos mirando de reojo esto y aquello, fiesta por aquí y por allá (porque de la causa saharaui ha dado poco tiempo para informarse), a comer, beber y fumar. Y una mañana, el gobierno saharaui pondrá a nuestra disposición toda una flota de vehículos y saldremos hacia el muro a hacernos unas fotos. …¿?....

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